El día 12 de abril los alumnos del IES Profesor Hernández Pacheco asistieron a la representación de Las Bacantes de Eurípides y de Anfitrión de Plauto en la XXII edición del Festival Juvenil de Teatro Clásico de Mérida. La representación de las dos piezas teatrales se llevó a cabo por los alumnos del grupo de teatro Noite Bohemia del IES Menéndez Pidal de La Coruña. Por la mañana la lluvia no dejó de caer desde el primer minuto hasta el último con intensidad. A pesar de ello, tanto los actores como el público asistente aguantaron estoicamente el chaparrón. La versión puesta en escena por los alumnos gallegos no dejó a nadie indiferente: tal vez ha sido una de las mejores piezas representadas en este festival en muchos años. Lástima que la lluvia deslució la representación y causó muchas incomodidades tanto a los actores como al público asistente.
Por la tarde también se representó el Anfitrión de Plauto, aunque tuvo que hacerse sobre la orquestra y sin equipo de sonido, ya que la escena estaba llena de charcos y el agua seguía cayendo al comienzo de la representación. Afortunadamente no arreció tanto la lluvia como por la mañana y se agradeció este respiro que dio Júpiter Tonante. Más flojita esta pieza teatral vespertina, aunque tal vez influían las adversas condiciones meteorológicas y el deseo de los asistentes de que acabara ya todo para poder despojarse de las empapadas vestimentas y darse una ducha caliente.
Lástima que la protagonista del día fuese la lluvia más que el teatro. Lástima primero por las compañías que llevan preparándose todo el año, porque su trabajo no brilla como debiera, y lástima también por los centros que acuden después de organizar todo y se encuentran unas condiciones poco propicias para ver una obra de teatro, con riesgo de resfriados incluido.
Sabemos que es difícil organizar el festival y que es difícil encontrar un lugar alternativo cuando llueve. Sin embargo, creemos que así no merece la pena asistir, porque verdaderamente no compensa los preparativos y esfuerzos de unos y otros, ni puede disfrutarse de una representación teatral. Los organizadores explicaban que no hay lugares alternativos con el aforo necesario. Tal vez, si se conocen las condiciones meteorológicas adversas con antelación, se podría pensar en hacer varias sesiones en el Palacio de Congresos o en un Pabellón Polideportivo o, si no, en suspender directamente las representaciones y devolver el dinero a los alumnos.
De cualquier manera comprendemos las dificultades y felicitamos a los organizadores del festival, a los grupos de teatro que nos obsequian con representaciones magníficas y a los alumnos que acuden como público año tras año para poner de manifiesto que el teatro clásico grecolatino sigue y seguirá vivo.
En este enlace pueden verse algunas fotos del evento.